A mediados del mes de diciembre aparecía la noticia de que Obama había ordenado abrir el diálogo con Cuba. Sin duda, se trataba de un momento histórico.
Tras más de medio siglo de agresión económica, el gigante del norte, la cuna del neoliberalismo, el país más belicista e imperialista de nuestros días, se da cuenta de que el bloqueo económico no ha podido tumbar la revolución. Un bloqueo que nace con la intención de derrocar al gobierno revolucionario cubano, aislando a Cuba económicamente con todos los problemas que eso supone.
Desde el comienzo de la revolución y las crispaciones con EEUU, Cuba ha estado abierta al diálogo, pero EEUU siempre ha estado obsesionado por controlar la isla del Caribe. Cuando Cuba era una colonia de España, a EEUU le interesaba que lograra la independencia para hacer y deshacer en la isla a su antojo, por lo intervino y ayudó a que la consiguieran. Y así fue, Cuba era el patio trasero de los yankees; era su burdel, hasta que Fidel Castro encabezando el Movimiento 26 de Julio logró hacerse con el poder derrocando el gobierno títere de Batista.
Compañeros y compañeras derrotistas ya se lamentan de este paso dado por Estados Unidos, y ven un MacDonald en La Habana como signo de que el imperio habrá llegado a la isla y habrá tirado abajo 56 años de revolución. Otros más dogmáticos serían capaz de mandar a los Castro al gulag por negociar con los yankees. Pero lejos de derrotismos y dogmatismos, este paso es una victoria para el pueblo cubano, para la revolución, y para los pueblos del mundo que resisten al imperialismo. El grande se ha cansado de acosar e intentar mangonear al pequeño, ya que la raíz del problema radica en que Cuba, tras la revolución, ha reclamado su soberanía como país independiente y no ha permitido que EEUU le diga lo que tiene o no tiene que hacer, y eso al grande nunca le ha hecho gracia.
Personalmente veo al Partido Comunista Cubano lo suficientemente inteligente y maduro para mantenerse firme y no cambiar por las presiones ejercidas por los yankees. No sólo por haber aguantado más de cinco décadas de bloqueo económico, sino porque el gobierno cubano, desde el triunfo de la revolución, ha sabido corregir y aprender de sus propios errores, levantándose dignamente y siguiendo el camino que comenzaron el 1 de Enero de 1959. Han superado crisis como la caída de la URSS y el llamado "periodo especial" en la década de los noventa. Han aguantado el continuo bombardeo de propaganda contra la revolución, así como los múltiples intentos de asesinato a Fidel Castro por parte de la CIA y los ataques terroristas contra el gobierno cubano. Por ello, el comienzo de este diálogo ha sido una victoria histórica de la revolución cubana, quienes espero y estoy seguro de que así será, se mantendrán firmes en sus ideales y seguirán avanzando, y deseo que en este año 2015 se den los primeros pasos para que caiga el maldito bloqueo económico impuesto ilegalmente por EEUU.
Y como muchas veces una canción vale más que mil palabras, les dejo un tema de Carlos Puebla que hablaba de la problemática con EEUU por su intención de intervenir en la isla, titulado "De igual a igual".
¡Viva Cuba libre y socialista!
¡Viva la revolución!
